Momentos de pánico se vivieron este miércoles por la tarde en la carretera que conecta Entre Ríos con Palos Blancos, en el departamento de Tarija, cuando un camión cisterna que transportaba diésel perdió el control, se volcó y estalló en llamas antes de llegar a la localidad. El siniestro ocurrió en la zona de San Simón, una subida conocida por su peligrosidad.
Según reportes preliminares, el vehículo —con placa 3021-KBC— había partido desde Campo Pajoso con destino a Santa Cruz de la Sierra. El conductor, identificado como Ramón Roca, derrapó por más de 100 metros antes de impactar contra unos árboles, lo que provocó el incendio del tanque de combustible.
Testigos relataron que el fuego se podía ver desde varios kilómetros de distancia y que el calor era intenso incluso a decenas de metros del lugar. “Fue como una explosión. El cielo se tiñó de negro y el humo subía como una columna gigante”, relató un vecino de la zona.
Las autoridades locales y bomberos llegaron rápidamente al lugar para controlar las llamas, pero el incendio consumió por completo el vehículo y el combustible que transportaba. La vía quedó bloqueada por varias horas, generando un caos vehicular en ambos sentidos.
El cuerpo del conductor fue encontrado calcinado dentro de la cabina, según confirmaron fuentes policiales. La Fiscalía abrió una investigación para determinar las causas exactas del accidente, aunque se presume que el exceso de velocidad y las condiciones del camino pudieron haber influido.
Este trágico hecho se suma a una serie de accidentes registrados en rutas del Chaco boliviano en los últimos meses, muchos de ellos vinculados al transporte de carga pesada y combustible.