
El expresidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, calificó como “de terror” los datos publicados por el Banco Central de Bolivia (BCB). Según el informe, las reservas internacionales líquidas se han reducido a niveles críticos.
Divisas disponibles: apenas 75 millones de dólares, suficientes para cubrir entre 10 y 12 días de importación de carburantes.
Comparación histórica: este monto representa solo el 0,6% de las reservas líquidas de 2014.
Reservas de oro: bajaron de 24,12 toneladas a 22,9 toneladas, una caída del 5%.
Romero explicó que parte del oro está en el exterior, lo que genera rendimiento, pero advirtió que 6,6 toneladas están ignoradas y 2,6 en tránsito. Según las normas del FMI, estos volúmenes deberían considerarse pasivos, no activos. “No cumplimos las 22 toneladas que exige la Ley del Oro, lo que aumenta la vulnerabilidad de la economía”, señaló.
Déficit fiscal en ascenso
El déficit fiscal hasta noviembre de 2024 superó los 39 mil millones de bolivianos, equivalente al 9,9% del PIB. Se proyecta que la gestión cierre cerca del 12%.
Romero recordó que el gobierno anunció el pago de cuentas pendientes desde 2023, lo que incrementará aún más el gasto público.
Emisión monetaria y deuda interna
Emisión monetaria: más de 100 mil millones de bolivianos (casi 15 mil millones de dólares) inyectados en la economía.
Deuda interna: el BCB emitió cerca de 185 mil millones de bolivianos a favor del sector público no financiero.
El anterior gobierno se dedicó a emitir dinero, aumentar la deuda interna y casi liquidar las reservas internacionales, principalmente el oro, sin resultados positivos. La economía decreció en 2024 y en el primer semestre un 2,4%”, afirmó.
Llamado a medidas estructurales
Romero concluyó que es necesario pasar de las declaraciones a las acciones:
Necesitamos medidas estructurales en el tema económico. Si hay responsables, deben enfrentar los procesos correspondientes”.
