Iván Lima Magne, el abogado paceño de 50 años quien, hasta el 26 de septiembre fue ministro de Justicia por casi cuatro años, renunció al alto cargo para dar gobernabilidad a la gestión del presidente Luis Arce y porque además, tenía una relación “muy mala” con la Asamblea Legislativa.
La exautoridad, en entrevista con EL DEBER Radio realizó un balance de los años al mando del ministerio de Justicia, la cartera políticamente más estratégica del Gobierno de Luis Arce, desde donde se marcó la línea de acción en temas fundamentales, desde una fallida reforma judicial, la defensa férrea de los magistrados prorrogados del Órgano Judicial y del TCP, hasta la intención de hacer un referéndum constitucional, pasando por encima de la Asamblea Legislativa.
“Yo creo que soy un problema para la gobernabilidad de este país, mi relación con la Asamblea Legislativa es muy mala”, admitió Lima al Grupo EL DEBER.
En los días de más tensión política y social que se vivió en la ciudad de La Paz donde llegó Evo Morales con su marcha y plantó un ultimátum al presidente Luis Arce, Iván Lima presentó su renuncia irrevocable, misma que fue aceptada por el jefe de Estado.
Tras el alejamiento de Lima del gabinete de Arce, se tejieron varias conjeturas, entre ellas que Lima renunció para evitar que Morales cumpla su amenaza de bloquear las carreteras del país, o las versiones que dieron funcionarios de rangos medios del Ejecutivo, en sentido de que a partir de ahora la tarea de Lima sería llevar adelante el proceso contra Morales, o que el presidente Luis Arce le pidió que renuncie y que sería designado como fiscal interino. La exautoridad aclaró que su renuncia no fue por ninguna de esas causas.
“Yo no soy el titular de la acción penal (contra Evo Morales) en este momento, no voy a ser fiscal general, no aceptaría que se me designe por decreto supremo y tampoco he participado en el proceso”, subrayó.ELDEBER