«Solo faltó que ordenen mi descuartizamiento inmediato en una plaza, como ocurría en la Colonia cuando los conquistadores castigaban severamente a los indígenas rebelados contra la opresión», expresó Evo Morales a través de sus redes sociales, tras conocer la orden de aprehensión y la declaratoria de rebeldía en su contra.
El juez Nelson Alberto Rocabado, de Tarija, no solo emitió la orden de aprehensión contra el exmandatario, sino que también ordenó el congelamiento de sus cuentas bancarias y la anotación preventiva de sus bienes, dentro del proceso que lo involucra por presunta trata de personas.
El expresidente no se presentó a la audiencia programada, alegando problemas de salud, una justificación respaldada por su defensa. Sin embargo, Morales afirmó que la declaratoria de rebeldía «ya estaba redactada antes de la audiencia» e insinuó que fue elaborada por los ministerios de Gobierno y Justicia.
Además, Morales acusó al gobierno de Luis Arce de utilizar la justicia como un instrumento de persecución política.
«No pudieron probar un delito y se inventaron otro. Jueces y fiscales no respetan el debido proceso ni la presunción de inocencia, como ordena la Constitución», señaló.
El exmandatario también denunció que los «verdaderos responsables de trata y tráfico» no están siendo investigados y calificó al actual gobierno como un «régimen del terror». Según Morales, estas acciones tienen como objetivo impedir su participación en las próximas elecciones presidenciales.LOSTIEMPOS