En las últimas horas, el Comando General de la Policía Boliviana emitió un memorándum que instruye el cierre total y ordenado de las Divisiones de Comisaría de Tránsito en todo el país.
La orden está dirigida a la Dirección Nacional de Tránsito, Transporte y Seguridad Vial y se conoció apenas un día después de la posesión del general Mirko Sokol como nuevo Comandante General.
El mensaje de Sokol
Durante su discurso de posesión, Sokol fue categórico:
Queda totalmente prohibido cobrar un solo centavo a ningún ciudadano boliviano por ningún motivo”, afirmó.
El jefe policial recalcó que ningún efectivo, sin importar su rango, podrá recibir dinero o dádivas. “Si yo no recibo nada, el último sargento tampoco deberá hacerlo”, añadió.
Detalles del memorándum
- Todas las actividades operativas y administrativas deben finalizar en el día.
- Se debe elaborar un inventario detallado de mobiliario, equipos, armamento y vehículos.
- El personal policial y administrativo deberá presentarse ante Recursos Humanos de las Direcciones Departamentales de Tránsito para recibir nuevas asignaciones.
Objetivo de la medida
El cierre busca eliminar espacios de corrupción y reorganizar el trabajo policial.
Sokol advirtió: “No se arriesguen a perder su libertad, a perder su profesión por unos cuantos centavos. Vamos a utilizar todos los mecanismos que la ley nos otorga para que aquello se evite”.
Lo que viene
La disposición marca el inicio de una reestructuración institucional. Aunque las Direcciones Departamentales de Tránsito seguirán funcionando, las comisarías —donde se denunciaban cobros irregulares— dejarán de operar.