
En la penúltima semana de su gobierno, el presidente Luis Arce, promulgó anoche la “Ley corta excepcional y transitoria para garantizar el abastecimiento de diésel y gasolina en situación de emergencia”, norma que fue impulsada directamente por el Comité Cívico Pro Santa Cruz. Esta ley fue puesta en vigencia tras un intenso lobby de los cívicos cruceños que llegaron hasta La Paz para socializar la misma con al menos tres grandes sectores productivos.
“De manera excepcional y por lapso de tres (3) meses a partir de la publicación de la presente Ley, se autoriza a personas naturales o jurídicas privadas la importación de diésel y gasolinas para su comercialización en mercado interno (sic)”, se lee en el segundo artículo de la Ley número 1657.
Minutos después de su promulgación, el vicepresidente del Comité Pro Santa Cruz, Agustín Zambrana, aplaudió que Arce promulgara la ley y señaló que esa es una muestra clara del “fracaso” del modelo económico que impuso el gobierno saliente del MAS.
La Ley 1657 establece un régimen excepcional de tres meses que permitirá a personas naturales o jurídicas importar e internar diésel, gasolina y gas licuado de petróleo (GLP) bajo la supervisión de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), entidad que será la encargada de otorgar la Licencia Excepcional de Importación y Despacho Directo (LEIDD), mediante una ventanilla digital única, con un plazo máximo de 48 horas hábiles.
Asimismo, señala que la importación de combustibles, de manera excepcional, “contará con la liberación del Impuesto a la Transferencia – IT y del Impuesto al Valor Agregado – IVA”, y las estaciones de servicio pueden comprar su combustible a un importador habilitado o importar su combustible directamente desde frontera. Todo, bajo un control estricto de la ANH.
Por ejemplo, controlará que “el carburante con subvención no sea comercializado como el carburante importado de manera directa” ELDEBER.
